Perspectiva corporal (prosa)

 


Tener un cuerpo diminuto es aliviado, pero se vuela con la más leve brisa. Para que eso no ocurra hay que sujetarlo debajo del televisor, del celular, de algún bonito trozo de mármol o cosa parecida

Un cuerpo pequeño alcanza una precaria estabilidad que permite estar con la ventana abierta. A través de ella suele entretenerse opinando sobre el mundo desde una cómoda poltrona

Cuando el cuerpo es mediano ya se puede salir a la calle pero, con especial cuidado en las horas pico. Para sobrevivir a la muchedumbre debe treparse a un árbol o al capot del auto

Un cuerpo grande se hace lugar en el mundo aún en las aglomeraciones más densas, se hace oír con claridad  y disfruta comiendo frutas directamente de los árboles

El cuerpo gigante es ocasional, pero posibilta placeres especiales. Cuando aparece me gusta caminar con él hacia Plaza de Mayo haciendo vibrar las cornisas de los edificios